La inestimable contribución de la mujer rural al desarrollo
Conseguir la igualdad de género y empoderar a las mujeres rurales no solo es lo correcto, sino que es un ingrediente fundamental en la lucha contra la pobreza extrema, el hambre y la desnutrición.
Las mujeres rurales-una cuarta parte de la población mundial- trabajan como agricultoras, asalariadas y empresarias. Labran la tierra y plantan las semillas que alimentan naciones enteras. Además, garantizan la seguridad alimentaria de sus poblaciones y ayudan a preparar a sus comunidades frente al cambio climático.
Sin embargo, como se?ala ONU Mujeres, las campesinas sufren de manera desproporcionada los múltiples aspectos de la pobreza y pese a ser tan productivas y buenas gestoras como sus homólogos masculinos, no disponen del mismo acceso a la tierra, créditos, materiales agrícolas, mercados o cadenas de productos cultivados de alto valor. Tampoco disfrutan de un acceso equitativo a servicios públicos, como la educación y la asistencia sanitaria, ni a infraestructuras, como el agua y saneamiento.
Las barreras estructurales y las normas sociales discriminatorias continúan limitando el poder de las mujeres rurales en la participación política dentro de sus comunidades y hogares. Mundialmente, con pocas excepciones, todos los indicadores de género y desarrollo muestran que las campesinas se encuentran en peores condiciones que los hombres del campo y que las mujeres urbanas.
Este Día Internacional no olvidemos sus demandas, apreciemos su labor en el suministro de alimentos y servicios en zonas menos desarrolladas y reivindiquemos unas zonas rurales en las que puedan contar con las mismas oportunidades que los hombres.
Conoce los datos: Mujeres y ni?as rurales
Descubre a través de esta infografía de ONU Mujeres los retos y las consecuencias a los que se enfrentan las mujeres y ni?as rurales en comparación con los hombres o los entornos urbanos.
?Sabías que...?
- En promedio, las mujeres representan algo más del 40% de la fuerza laboral agrícola en los países en desarrollo, pudiendo llegar a más del 50% en determinadas partes de ?frica y Asia.
- Menos del 15% de los propietarios de tierras en todo el mundo son mujeres.
- En algunos países, más del 50% de las ni?as de familias rurales pobres se casarán siendo ni?as.
En primera persona
Nila: mujer, rural, indígena y empresaria
En su casa reinaba el silencio cuando, de repente, Petronila Ríos escuchó un fuerte pitido. Un mensaje apareció en su teléfono: “Nila, necesito cuatro pollos frescos para hoy”. Y Nila sonrió. Su perfil en las redes sociales había dado sus frutos.
Así arranca la y la de otras mujeres indígenas de China Kichá (Costa Rica) que, gracias a un proyecto de ONU Mujeres y FAO, vieron prosperar sus negocios rurales desde el respeto a la naturaleza con la que conviven.