10 de diciembre de 2020

Las Naciones Unidas se fundaron hace 75 a?os con el fin de promover la paz y la seguridad mundiales, mejorar el acceso al desarrollo e impulsar el respeto de los derechos humanos.

A medida que la gente dejaba atr¨¢s dos guerras mundiales, a medida que sal¨ªan a la luz todos los horrores del Holocausto, a medida que la sombra de la Guerra Fr¨ªa comenzaba a descender y a medida que los que viv¨ªan bajo el yugo del colonialismo (por aquel entonces, casi un tercio de la poblaci¨®n mundial) luchaban por su libertad, el respeto por los derechos humanos se convirti¨® en un grito de guerra en todo el mundo. La Declaraci¨®n Universal de Derechos Humanos, adoptada el 10 de diciembre de 1948, sirvi¨® de inspiraci¨®n a la gente de todo el planeta y sent¨® las bases para la gobernanza y las reformas institucionales, para una legislaci¨®n progresista y centrada en las personas y una educaci¨®n que resuene de generaci¨®n en generaci¨®n.

Pero, desde hace algunos a?os, en algunas partes del mundo, el respeto de los derechos humanos se ha visto reducido. El Secretario General de las Naciones Unidas y la Alta Comisionada para los Derechos Humanos han advertido de una reacci¨®n violenta, tanto en el plano nacional como en los debates celebrados en las Naciones Unidas, especialmente en lo que respecta a la lucha contra el terrorismo, en relaci¨®n con los derechos de la mujer, as¨ª como en el espacio para la participaci¨®n y el activismo de la sociedad civil.

Los expertos independientes en materia de derechos de las Naciones Unidas han dado la voz de alarma sobre el pronunciado aumento de los ataques, tambi¨¦n de los asesinatos, a los defensores de los derechos humanos, desde protectores del medio ambiente hasta periodistas. La pandemia de COVID-19 ha dejado al descubierto una pobreza m¨¢s profunda, un aumento de las desigualdades, una discriminaci¨®n estructural y arraigada, y otras carencias que no dejan de crecer en lo relativo a la protecci¨®n de los derechos sociales y econ¨®micos. 

?Se ha desvanecido la popularidad de los derechos humanos?

En 2020, para conmemorar su septuag¨¦simo quinto aniversario, las Naciones Unidas se disponen a escuchar a la gente para la que trabajan. De este modo, han lanzado una consulta mundial para comprender los miedos y esperanzas de la gente de cara al futuro, as¨ª como para tratar de entender mejor las expectativas acerca de la cooperaci¨®n internacional y de las Naciones Unidas en particular.

En nuestras consultas participaron de manera directa aproximadamente un mill¨®n y medio de personas, por medio de encuestas y di¨¢logos en todos los Estados miembros y observadores de las Naciones Unidas. Mucha m¨¢s gente hizo lo mismo a trav¨¦s de nuestros asociados sobre el terreno, desde los grandes movimientos juveniles hasta los empresarios y los grupos ind¨ªgenas.

Tambi¨¦n solicitamos a Edelman Intelligence y al Pew Research Center que llevasen a cabo un sondeo representativo e independiente entre 50.000 personas repartidas en 50 pa¨ªses que sirva para verificar la realidad y garantice que no solo escuchamos a aquellos que simpatizan con nosotros.

En medio de una pandemia, con unas cifras de pobreza en aumento, conflictos sin resolver y un cambio clim¨¢tico desenfrenado, no est¨¢bamos seguros de que el fomento del respeto de los derechos humanos fuese a mencionarse, mucho menos como una prioridad para el p¨²blico mundial.

Pero as¨ª fue. De entre todos los asuntos que se citan como prioridades para la recuperaci¨®n de la pandemia, en el centro de todos ellos se encuentran los derechos humanos: desde la obtenci¨®n de un mejor acceso a los servicios b¨¢sicos hasta la mejora en el modo en que hacemos frente a las desigualdades. Mientras tanto, las propuestas de soluciones m¨¢s comunes son aquellas que se centran en aumentar la participaci¨®n de la gente en la adopci¨®n de decisiones que afectan a sus vidas, as¨ª como en aumentar la inclusi¨®n de grupos marginados y vulnerables. En el largo plazo, despu¨¦s de la lucha contra el cambio clim¨¢tico y la destrucci¨®n del medio ambiente, todas las prioridades principales de los encuestados reflejan la aspiraci¨®n de alcanzar un respecto m¨¢s universal de los derechos humanos. 

Tras la Segunda Guerra Mundial, el llamamiento al respeto universal de los derechos humanos y la dignidad humana uni¨® a toda la humanidad. Y, hoy en d¨ªa, sucede lo mismo. En un momento de gran angustia y en el que existen unos desaf¨ªos mundiales sin precedentes, la gente recurre a los derechos humanos porque constituyen un factor impulsor de la esperanza y una medida justa para llevar a cabo una acci¨®n decisiva que nos permita hacer realidad el futuro que queremos. Debemos hacer caso de dicho llamamiento.
 

La Cr¨®nica?ONU? no?constituye un registro oficial. Tiene el privilegio de acoger a los altos funcionarios de las Naciones Unidas, as¨ª como a distinguidos colaboradores de fuera del sistema de las Naciones Unidas cuyas opiniones no son necesariamente las de las Naciones Unidas. Del mismo modo, las fronteras y los nombres que se muestran y las designaciones utilizadas en los mapas o en los art¨ªculos no implican necesariamente un apoyo o una aceptaci¨®n por parte de las Naciones Unidas.?